Archivo de la categoría: #TestMPM

El saloncito de Laura

Lleva más de 25 años al frente de una librería que ha ido transformando en un espacio al mismo tiempo abierto e íntimo. Laura Velázquez, a la que puedes visitar en Librería Velázquez (Paseo de Extremadura, 62), es una de las principales catalizadoras de la vida cultural del barrio en el que creció, vive y trabaja. Así respondió a nuestro test madrileñista.

Microplán Madrid: ¿Qué lugar de Madrid es tu Madrid?

Laura Velázquez: El Puente de Segovia. Está en el barrio en el que vivo, el de Puerta del Ángel, y representa un punto de unión entre el Madrid del centro y otro Madrid que está empezando a emerger en este momento en esta orilla del río.

MpM: ¿Qué habitante de Madrid es tu Madrid?

LV: Para mí Benito Pérez Galdós. Y no hace falta añadir nada más.

MpM: Toca hacer un plan de comida castiza y lo tienes que proponer tú. ¿Dónde nos llevas?

LV: A La Bola a comer cocido madrileño. Eso está buenísimo.

MpM: ¿Qué has hecho, visto, experimentado en Madrid que te ha vinculado a la ciudad fuertemente?

LV: Mi trabajo en mi librería de Puerta del Ángel. Me vincula a toda la gente que pasa por la puerta a diario, a mi barrio y, por extensión, a Madrid. Es una conexión que va desde mi trabajo a la gente de Madrid.

MpM: ¿Qué plan recomiendas que hagamos en Madrid ahora?

LV: Conocer mi barrio: visitar la iglesia de Santa Cristina, que es de estilo neomudéjar, obra de Repullés y Vargas, y luego tomar una copita en el mercado Tirso de Molina, donde ahora hay de todo para picar. Tenemos un vegano, tapas, arroces, un ámbito gastronómico amplio. Y después, podemos bajar a ver las vistas desde el Puente de Segovia hacia el Palacio Real, la Almudena y la zona del Campo del Moro, y dar un paseo por Madrid Río hasta el Puente del Rey, llegar a Príncipe Pío y desde allí pararnos a mirar la vista desde el otro lado, la de Puerta del Ángel y la Casa de Campo.

DJ Nano, el madrileño galáctico

De promotor a ejecutante, y de ahí a… todo y más. DJ Nano, el más reconocido y reconocible artista del dance patrio es un inquieto madrileño que creció en el emblemático complejo residencial Galaxia de Moncloa.

Acaba de crear el musical The Rhythm of the Night, en cartel en el Gran Teatro Príncipe Pío hasta finales de mayo. La obra es un viaje al interior de la noche madrileña de 1993 con la música electrónica de la época hilvanando las peripecias de Josito, un joven que va a descubrir en las discotecas Attica, Chocolate, Barraca o New World que su destino no es ser ingeniero de telecomunicaciones.

Una cita por la que ya han pasado en anteriores ediciones centenares de miles de fans de DJ Nano: A summer Story, Oro Viejo, vuelve este año a la Ciudad del Rock del Arganda los días 17 y 18 de junio de 2022.

Microplán Madrid: ¿Qué lugar de Madrid consideras que es tu Madrid?

DJ Nano: El barrio de Moncloa. Es el primer recuerdo que tengo de mi Madrid, ya que es donde yo me crié en unos edificios que se llaman Galaxia que siguen estando en pie y bueno, pues tengo un recuerdo de un Madrid muy movido. Yo nací a finales de los 70, por lo tanto los 80 los viví allí. Y recuerdo un Madrid pues como era el Madrid de los 80 y más en Moncloa que la zona estaba llena de vida: mucha música, mucha cultura. Aunque yo me mueva mucho por la ciudad y sea muy madrileño en general, es verdad que es el sitio por el que siempre paso porque voy a ver a mi madre, a gente.

MpM: ¿Qué habitante De Madrid dirías que es tu Madrid?

DJN: Creo que Madrid es la ciudad del mundo en la que más cosas puedes hacer a cualquier hora. Entonces, me gusta el madrileño que está muy fuera de su casa, muy por la ciudad, que es algo que yo suelo hacer muy a menudo. El que visita muchos locales, muchos museos. El madrileño activo, el que vive su ciudad. Tenemos una ciudad maravillosa y por lo tanto me siento muy identificado con ese madrileño al que le gusta vivir Madrid.

MpM: Toca comilona castiza y tú tienes que decidir dónde vamos y qué plato pedimos.

DJ Nano: Podría escoger muchísimos sitios, pero me voy a quedar con Taberna La Daniela, la de Cuchilleros, local al que llevo yendo muchísimo tiempo a comer cocido. Soy un gran amante del cocido y hay muchísimos otros sitios buenísimos donde comerlo, pero a la Daniela voy desde hace años y de hecho hago muchas reuniones de amigos allí cuando toca cocido.

MpM: ¿Qué es eso que tú has visto, hecho, amado en Madrid que de verdad te ha vinculado a la ciudad?

DJN: Yo he vivido en Madrid un crecimiento enorme de mi profesión siendo residente de Madrid, siendo residente de muchas discotecas míticas. Ahora se nos considera artistas, al principio éramos los pinchadiscos y ya está. Haber vivido ese paso me hace estar muy agradecido a Madrid. Tengo recuerdos de noches increíbles.

MpM: Si tuvieras que proponer un plan para hacer ahora en Madrid, una exposición, un concierto, un bar, ¿dónde nos llevarías?

DJN: Por la mañana iríamos al Escorial. Luego a comer al grandísimo restaurante Sala de Guadarrama. Una de las zonas que más me gustan de Madrid es la Sierra. Y luego pues bajaríamos al centro para hacer una ruta de vinos por la Plaza Mayor, Gran Vía y demás, es una maravilla los locales que podemos encontrar por ahí. Y acabaríamos en un concierto mío, claro, para acabar como hay que acabar, que es por todo lo alto y celebrando.

Alfonso J. Ussía a lo Proust

Recordar para escribir o escribir para recordar, como Proust, como Alfonso J. Ussía. El escritor de Chamberí ha novelado con latido firme y madrileñista su trayectoria vital y laboral junto a un conocidísimo músico madrileño en los primeros años del s. XXI en su segunda obra literaria, Vatio (Coba Fina, 2021). Desde aquí te la recomendamos con ilusión como novela de rock, de iniciación, del Madrid del que se habla y del Madrid del que no se habla.

Nos juntamos con Alfonso J. Ussía, autor también de la novela sobre el maquis cántabro de la posguerra Cuento del Norte (Caligrama, 2020), en Tienda de Vinos o El Comunista (c/ Augusto Figueroa 35), casa de comidas de referencia. De ahí que lo que estás leyendo venga precedido de las albóndigas del lugar, uno de sus platos emblemáticos, que compartimos ese día. Si las magdalenas devuelven recuerdos, las albóndigas, ni te cuento. Te lo cuenta Ussía.

Microplán Madrid: ¿Qué lugar de Madrid consideras que es tu Madrid?

A. J. Ussía: Se me ocurren dos lugares. Te diré que tengo una magdalena proustiana muy fuerte con la entrada a Madrid por Avenida de América, con Torres Blancas… Ahí estaba el Rock-Ola y yo miraba a la derecha, había oído hablar tantas veces de ese sitio, y recuerdo de pequeño que entrábamos los fines de semana por la noche de vuelta de casa de mis abuelos, que vivían fuera, siempre por la avenida América, y me encantaba. Y mira que probablemente sea la entrada más fea que tiene Madrid, pero también es la que más me retorna. Con lo bonito que es entrar a Madrid desde la Carretera de la Coruña, que ves Puerta de Hierro, entrar a Madrid viendo el Palacio Real y la Almudena o incluso por la Carretera de Burgos con sus edificios, pero la Avenida de América es muy gata. Todo el mundo que ha llegado a Madrid para montárselo ha llegado a Chamartín o a Atocha o a la estación de autobuses de Avenida de América.

Eso a través del cristal, de pasada mirando desde dentro de un vehículo. Pero si tuviera que decir cuál es mi zona de Madrid, sería la que va de Ventura de la Vega a Antón Martín. Yo crecí en Chamberí, pero a los 18 años me fui para Antón Martín y los momentos más felices de mi vida o los más libres, los he vivido allí. Huertas, también Lavapiés…

MpM: ¿Qué habitante De Madrid dirías que es tu Madrid?

AJU: El chulo, sin ninguna duda, el gato. A mí hay una cosa que me divierte mucho del madrileño y es que está acostumbrado a recibir mucho de mucha gente, todas las Españas se cruzan aquí. Pero luego el madrileño está huérfano de acento, es un chulo muy desamparado que busca su identidad, y normalmente la descubre cuando sale de Madrid y se le pega la forma de hablar de allí. Si va a Galicia, se le pega el acento de allí. Si va a Andalucía, al tercer día pide las cañas: «Pisha, dame una cerveza». Y lo he notado en muchos gatos, en muchos madrileños.

Ese personaje, no te hablo del chulo canallesco, ni del épico, del golfo callejero, no, no, te hablo de ese gato que lo mismo tiene un restaurante, que descarga un camión de cerveza, que es el churrero del barrio, que tiene esa forma de hablar, ese aire, esa presencia, ese fin de semana; ese es mi madrileño.

MpM: Toca comilona castiza y tú tienes que decidir dónde vamos y qué plato pedimos.

AJU: Depende de cómo ande el bolsillo. Ha habido momentos en los que la comida castiza que me podía permitir era en Tienda de Vinos, en El Comunista, y era unas albóndigas y una carne en salsa; en otros momentos ha sido un placer ir a Lucio y comerte un cochinillo que es una puñetera joya o a Botín. Mi sitio favorito en Madrid realmente es Casa Rafa que tiene los mejores pescados de la ciudad, la mejor ensaladilla rusa, o como haya que llamarla ahora por la corrección política, ensaladilla con mayonesa, jajaja, desde hace 60 o 70 años. Pero es un sitio que no te puedes permitir a menudo, es para ocasiones especiales y si no, yo soy de menú del día con mantel. Me encanta todo, esa es la suerte que tenemos en Madrid y en España y en los países mediterráneos, que en cualquier sitio comes bonito bien y barato.

MpM: ¿Qué es eso que tú has visto, hecho, amado en Madrid que de verdad te ha vinculado a la ciudad?

AJU: hay una cosa que me encanta y que es que en cuanto me voy no sabes lo que echo de menos la ciudad. Yo soy muy de aquí, soy muy madrileño, mis padres son madrileños, mis abuelos no, no soy gato, pero sí te diré que me encanta irme fuera para poder decir que soy de Madrid. Voy al extranjero y me preguntan ¿de dónde eres? Where are you from? Y les digo, bueno, soy de España pero soy de Madrid. Es una suerte ser de aquí, nuestra ciudad es única, ¿sabes? Yo he vivido en Londres, he conocido Nueva York, París, pero Madrid es otra cosa. Es un pueblo grande. Aunque ahora se está volviendo más fría, se está perdiendo esa cordialidad, esa mirada, antes te cruzabas con cualquier persona y le dabas los buenos días, le dejabas pasar, le dabas un pitillo a un desconocido y te importaba te importaba tres narices. Teníamos esa manera de conectar y ahora es verdad que es una ciudad con intereses un poco más individualistas, más egoísta, menos cálida, pero me imagino que también es por todo lo que ha pasado, la pandemia… Estamos un poco desorientados, apabullados, pero imagino que todo eso se irá reseteando, espero.

MpM: si tuvieras que proponer un plan para hacer ahora en Madrid, una exposición, un concierto, un bar, ¿dónde nos llevarías?

AJU: Días lluviosos y bueno, cualquier día, yo aprovecharía para ir a un museo, tenemos la suerte de que aquí la monarquía, después de que en 200 años haya habido dos repúblicas, dos exilios y una dictadura, ha hecho que todo sea nuestro. Tú vas a Inglaterra, he estado hace poco con mis hijos, y el Museo Británico es todo expoliado. Aquí, tenemos una institución que es Patrimonio Nacional, pero la reina de Inglaterra sin embargo tiene sus palacios que son suyos con obras de arte dentro que son suyas. Aquí luego la gente es tan pretenciosa que cree que tiene que ser igual que el rey y eso no es así. La monarquía ha dado todos sus bienes al estado, entonces tú puedes ir al Prado y está todo allí, puedes sentarte y quedarte viendo las Meninas cuatro horas si quieres.

Después de ahí me iría a una coctelería, ahora me gusta mucho gastar cócteles y lo mismo, si estoy un poco más generoso de bolsillo puedo ir a Salmón Gurú en Echegaray y luego sin duda acabaría la noche en un concierto. Ahora la mejor programación la puedes encontrar en Café Central. Digo en plan improvisado. Luego, por ejemplo, en las Noches del Botánico va a tocar Nacho Vegas en julio. pero irte al Café Central, escuchar un buen concierto de jazz y después, claro, perderte por la noche de Madrid, que se está recuperando. Por la propia calle Echegaray o por Lavapiés, que es una garantía. Malasaña, yo creo que se está desvirtuando, no sé si es porque yo me he hecho mayor… La veo muy ruidosa y con poca sustancia.

Carlos Galán maravillándose en Madrid

El creador del sello discográfico Subterfuge, Carlos Galán, descubridor de Australian Blonde, Dover y un larguísimo etcétera hasta La Niña Polaca y más allá, es el primer microentrevistado con las nuevas preguntas de nuestro test madrileñista.

Microplán Madrid: ¿Qué lugar de Madrid es tu Madrid?

Carlos Galán: Elegir un sitio solo de la ciudad más maravillosa del mundo se me antoja complicado, pero optemos por mi uno de mis favoritos, el Rastro. Representa el Madrid en esencia por su contexto, y por ser el ceremonial de los domingos y festivos. Hay quien dice que ya no es lo que era, yo apunto que nada es lo que era, pero el Rastro sigue siendo el corazón de Madrid.

MpM: ¿Qué habitante de Madrid es tu Madrid?

CG: El que apoya los bares de toda la vida, el pequeño comercio de barrio, el siempre, el que participa de los barrios y respeta su entorno. Si le añades ser del Atleti, ahí va un plus.

MpM: Toca castizampa y no se puede todo, tienes que elegir plato y local. ¿Dónde y a por qué vamos?

CG: Si toca cocido, tiro de clásicos como Malacatín o El Horno de Santa Teresa. Si hay que reivindicar nuevas propuestas, el de la Taberna de Pedraza es memorable. Las gallinejas, entresijos, chorrillos y demás manjares, en Casa Enriqueta, donde trabaja mi amigo Paulino, en General Ricardos. Los caracoles, en Casa Amadeo, en plena Ribera de Curtidores.

MpM: Eso que viste, hiciste, quisiste en Madrid que te vinculó de verdad y para siempre a la ciudad, ¿qué fue?

CG: Pues que por circunstancias familiares, viví fuera entre los 9 y los 17 años, y eso reafirmó mi amor profundo por mi ciudad, de la que estoy perdidamente enamorado.

MpM: Y ahora, ¿qué hacemos? Llévanos a un concierto, expo, bar…

CG: Ir a un concierto en la sala El Sol debería ser obligatorio. Como comprar unos discos en Marilians o Escridiscos, o libros en Nakama o Molar y ver las expos de La Fiambrera. Son un acto de amor, de apoyo al comercio local, que te van a hacer mejor persona y más feliz.

Ruth Alejandre asoma por Madrid, por los Balcanes…

La comunicadora sobre viajes y gastronomía Ruth Alejandre acaba de lanzar un libro en el que comparte sus experiencias en la península balcánica, Por amor a los Balcanes. Mantiene plenamente actualizado su proyecto Gastrogurú y vuela, vuela, vuelaaaa.

Microplán Madrid ¿Cuál de estos barrios de Madrid te resulta más atractivo? Chamberí, Lavapiés o el Barrio de las Letras.

Ruth Alexandre: Chamberí. Me encanta el ambiente que se respira en sus calles. Castizo, auténtico. Es tranquilo pero, a la vez, tiene una gran vida cultural. Uno de mis museos favoritos está en el barrio: la Casa Museo Sorolla. Cuenta además con teatros, cines y múltiples opciones gastronómicas. Me divierte pasear por sus calles y pararme a tomar café en alguna de las múltiples cafeterías de especialidad que han abierto en la zona, como Naji o La Colectiva.

MpM: Si vas a la barra de un bar madrileño a quedarte en ella (cuando se pueda y donde se pueda), ¿qué pides preferentemente? Caña, vermú o vino.

RA: Soy de buen comer… y beber. Así que depende del momento y del plan. Me encanta el vermú para la hora del aperitivo. El de La Bodega de la Ardosa con un pincho de tortilla es un combo perfecto. En verano disfruto con una caña bien fría y, para el momento afterwork, un buen vino. Puedes encontrarme tomando uno en La Máquina de Ponzano.

MpM: Para tomar algo al aire libre, ¿optas por subir a azoteas, buscas patios interiores interesantes o te quedas en una terraza a pie de calle?

RA: Reconozco que me encantan las azoteas. Se han puesto muy de moda en los últimos años las terrazas en las alturas, sobre todo en las azoteas de los hoteles, así que afortunadamente hay una amplia variedad y suelo ir variando para disfrutar de las diversas panorámicas que ofrecen de la capital. ¡Creo que he visitado prácticamente todas! Frecuento bastante también las terrazas a pie de calle. Me encanta estar al aire libre, así que las aprovecho desde que empiezan a calentar los primeros rayos de sol de la temporada y hasta que el tiempo invita a buscar terrazas o patios interiores.

MpM: Sale un plan comilonero castizo, ¿a qué le das? Callos a la madrileña, bocata de calamares o bacalao rebozado.

RA: Me gustan las tres cosas. Gracias a mi trabajo con Gastrogurú tengo la oportunidad de probar y degustar auténticas delicias culinarias. Entre ellas, por supuesto, estos tres platazos castizos. Acercarse el fin de semana a Casa Labra a la hora del aperitivo y tomar un vermut con su bacalao rebozado me parece un plan estupendo. Disfruto de un bocadillo de calamares calentito y recién hecho cuando llega el frío; sobre todo tomarlo en la Plaza Mayor cuando ponen el Mercado de Navidad. En Taberna y Media bordan la tortilla con callos. Una delicia.

MpM: ¿Dónde sueles ir cuando quieres disfrutar del arte, al Prado, al Thyssen o al Reina Sofía?

RA: El que más frecuento es el Prado. Repito el Reina Sofía una y otra vez porque tengo debilidad por Dalí. Y del Thyssen no me suelo perder sus exposiciones temporales. La que hay ahora La máquina Magritte es muy recomendable.

MpM: ¿Qué crees que ha hecho Madrid por ti?

RA: Ha hecho y sigue haciendo… Madrid me da energía, me saca una sonrisa, me sorprende a diario. Me ha regalado personas fabulosas y me ha visto crecer. Me ha visto feliz tanto de día como de noche. Me ha hecho saltar de alegría y llorar desconsoladamente. Me ha ofrecido su gastronomía, su cultura y sus cielos. ¡Cómo disfruto de sus cielos y atardeceres increíblemente bellos y únicos! A veces me ha puesto a prueba. En ocasiones nos hemos enfadado y me he ido. Pero siempre, al final… ¡vuelvo!

MpM: ¿Qué es lo último que has experimentado en Madrid?

RA: Un concierto improvisado, en petit comité, en un local minúsculo cerca de Ópera.

Adriana Alcol es Malasaña

Adriana Alcol es coruñesa de nacimiento y su tierra le tira lo que más, pero también es malasañera vocacional. Su barrio de acogida en Madrid le ha inspirado el blog Esto es Malasaña y es uno de los escenarios principales de Minutos Impares, su primera novela, un texto fluido, sólido y evocador que te recomendamos de verdad de la buena.

Microplán Madrid: Quédate con uno de estos barrios de Madrid: Malasaña, Canillas o Chamberí.

Adriana Alcol: Te responderé como buena gallega que soy que depende para qué. Malasaña es mi barrio y lo siento como mi casa; de él me gusta especialmente sentir que es como estar en un pueblo en medio de una gran ciudad y que a pesar de que tiene unos cuantos «peros», lo sigo queriendo igual. Canillas es el barrio de mi familia materna y durante el año 2015 viví allí durante una temporada en un pequeño apartamento cerca del Palacio de Hielo; de él adoro los recuerdos de la infancia, los bares que te sirven un vino y una tapa bien generosa a precios populares, que puedes hacer la compra en pequeños comercios y mercados que tienen productos de calidad y que no te dejan temblando la cuenta bancaria y sobre todo, me gusta esa vida de barrio que nunca ha perdido y la tranquilidad que me transmite. Y Chamberí es uno de esos barrios que disfruto como visitante, que me gusta especialmente de día y que no diría que no a vivir durante una temporada en una de esas casas con balcones que tiene frente a la plaza de Olavide.

MPM: En barra, ¿caña, vermú o vino?

AA: Siempre vino y a ser posible, godello.

MPM: ¿Eres de terraceo en azoteas, en patios interiores o a pie de calle?

AA: A pie de calle, y si puedo elegir, me encanta la terraza de el bar Gato en la plaza Dos de Mayo (que además, tiene un godello delicioso).

MPM: ¿Callos a la madrileña, bacalao rebozado o bocadillo de calamares?

AA: Llevo una dieta vegetariana desde 2016, pero si me lo hubieses preguntado antes de esa fecha, habría escogido el bocadillo de calamares.

MPM: ¿Dónde es más fácil que nos encontremos contigo, en el Prado, el Reina Sofía o el Thyssen?

AA: Creo que es más factible que me encuentres en pequeñas salas de exposiciones que en grandes museos, pero entre estos tres me quedaría con el Thyssen.

MPM: ¿Qué crees que ha hecho Madrid por ti?

AA: Creo que venir a vivir a Madrid en el año 2012 fue una decisión maravillosa; me abrió las puertas a llevar a cabo muchos proyectos que en mi cabeza solo eran sueños y que aquí poquito a poco se han ido haciendo realidad. Le recomendaría a todo el mundo que vive en una ciudad pequeña que disfrute al menos durante unos años de la vida en una ciudad grande y aunque la verdad es que en este momento de mi vida mi mayor deseo es poder regresar a A Coruña, sé que siempre voy a recordar esta etapa como una de las más bonitas que he podido experimentar. Siento que Madrid es una ciudad que me ha acogido y me ha abrazado desde el minuto uno que puse un pie en ella y por eso siempre le voy a guardar un cariño inmenso.

MPM: ¿Qué es lo último que has experimentado en Madrid?

AA: El pasado mes de noviembre presenté en Malasaña mi primera novela corta, Minutos impares, y esa sensación de sentirme arropada por mi gente y por mi barrio es algo que no voy a olvidar jamás. Madrid es una ciudad que desde fuera se puede ver como un lugar donde la gente siempre parece tener prisa, pero no es cierto, o al menos no siempre; Madrid es una ciudad que cuando aprendes a disfrutarla, te da experiencias maravillosas.

 

De casta le viene a José Ramón de Manolo 1934

La tercera generación de la familia del fundador del proyecto mesonero que hoy se conoce como Manolo 1934 la encabeza José Ramón Rodríguez, restaurador y filósofo del clasicismo madrileño (a la izquierda en la foto, acompañado de su jefe de cocina, Manuel Besteiro).

El local, en cuya cocina colabora también la cuarta generación de la familia, se encuentra  desde 1942 en la calle Princesa, 83, en el querido barrio de Argüelles de nuestro entrevistado. Hace poco pudimos disfrutar allí de un extraordinario cocido madrileño con toques gallegos (Galicia es la tierra de origen de Jose Ramón) .

Microplán Madrid: ¿Con qué barrio te quedas, Argüelles, Chamberí o Palacio?

José Ramón Rodriguez: Argüelles.

MpM: Nos vamos de barras, ¿prefieres caña, vermú o vino?

JRR: Vino.

MpM: ¿Mejor las terrazas en azoteas, en patios interiores o a pie de calle?

JRR: A pie de calle.

MpM: Plan gastronómico castizo, ¿pides callos a la madrileña, bacalao rebozado, bocadillo de calamares o cocido madrileño?

JRR: Callos.

MpM: ¿Frecuentas más el Prado, el Reina Sofía o el Thyssen?

JRR: Prado.

MpM: ¿Qué crees que ha hecho Madrid por ti?

JRR: Todo, aunque tengo orígenes gallegos, Madrid me ha formado en carácter, cultura, gustos, tendencias… También me ha ofrecido un espacio para desarrollarme profesionalmente. Amo esta ciudad (y mi barrio) como ninguna otra, por su tolerancia, por su diversidad y su enorme carga cultural, que te brinda a cada paso.

MpM: ¿Qué es lo último que has experimentado en Madrid?

JRR: Foro Gastronómico, realizado en el Palacio de Cibeles, organizado por Hostelería Madrid, donde se dieron cita cocineros y camareros de prestigio, formadores de escuelas de hostelería, proveedores y empresarios del sector.

Enzo Lauretta en sus palabras sobre Madrid

La beca Erasmus ha creado una volátil microsociedad paneuropea que se crea y se destruye cada año. Los gitanos del estudio es una obra reescrita en castellano por el escritor y publicista transalpino Enzo Lauretta (la escribió originalmente en su idioma natal) en un español italianizado que contribuye a sumergirse con su lectura en esa sensación de extrañamiento e hiperrealidad que produce el Erasmus. El autor vive en Madrid desde hace un lustro y vive intensamente la ciudad.

Microplán Madrid: ¿Con qué barrio te quedas, Lavapiés, Barrio de las Letras o Arganzuela?

Enzo Lauretta: Suelo ir a menudo al Barrio de las Letras y he vivido tanto en Malasaña como en Lavapiés pero de los tres me quedo con este último.

MpM: Nos vamos de barras, ¿prefieres caña, vermú o vino?

EL: Vermú, para mí siempre es la hora del vermú. También me apetece tomarme una caña de vez en cuando.

MpM: ¿Eres de terraceo en azoteas, en patios interiores o a pie de calle?

EL: En realidad soy más de barra, para una caña, un vermú o un cóctel; la barra es lugar de encuentros, de conversaciones e historias.

MpM: Plan gastronómico castizo, ¿pides callos a la madrileña, bacalao rebozado o bocadillo de calamares?

EL: Entre los tres prefiero el bocadillo de calamares y a veces también pido croquetas.

MpM: ¿Frecuentas más el Prado, el Reina Sofía o el Thyssen?

EL: He ido varias veces al Prado y al Reina Sofía, al Thyssen creo solo una vez, pero soy muy fan de sitios como la Fundación Canal o CaixaForum.

MpM: ¿Qué crees que ha hecho Madrid por ti?

EL: Me ha dado la oportunidad de realizar cosas que hasta ahora no había tenido la posibilidad de poder hacer.

MpM: ¿Qué es lo último que has experimentado en Madrid?

EL: Acabo de descubrir una coctelería bastante interesante que se llama San Mateo Circus, en Malasaña.

David Reche, un escritor mediterráneo en Madrid

A David Reche Espada lo trajeron de las orejas a Madrid hace poco más de un lustro desde el Mediterráneo valenciano. Aunque sueña con volverse al mar, no deja de sacarle todo el partido que puede a una ciudad como Madrid. Este ingeniero de caminos que viaja en Vespa por media España y hasta Marruecos, ha publicado tres libros de relatos y ahora está promocionando su cuarta criatura, una novela juvenil llamada A Macondo se va en línea recta, de la que va a destinar sus derechos de autor a dos asociaciones de padres de niños con cáncer: ASION y ASPANION. Podéis seguirle en @rechespada (Twitter e Instagram) y en el blog Relatos Improbables

Microplán Madrid: ¿Con qué barrio te quedas, Lavapiés, Barrio de las Letras o Arganzuela?

David Reche: ¿Pero para comer, vivir o bailar? Comer por las Letras, tapear y bailes nocturnos en Lavapiés (qué coño, también se come bien en Lavapiés). Y ya vivo casi en Argazuela

MpM: Nos vamos de barras, ¿prefieres caña, vermú o vino?

DR: Cañas entre semana y vermú el domingo por la mañana (bueno, después de las 12:00). El vino para la cena.

MpM: ¿Eres de terraceo en azoteas, en patios interiores o a pie de calle?

DR: «Soy un chico de la calle que vive su canción».

MpM: Plan gastronómico castizo, ¿pides callos a la madrileña, bacalao rebozado o bocadillo de calamares?

DR: Es cruel hacerme elegir. Los calamares prefiero reservarlos para el bar Los Curros en el muelle de Levante del Puerto de Santa Pola con vistas a la isla de Tabarca. El bacalao rebozado jamás lo probé tan rico como aquí (ahora me viene a la memoria la tapa que ponen en la taberna Oliveros), y los callos, que descubrí en mi llegada a Madrid, serán ya parte imprescindible de mi menú canalla.

MpM: ¿Frecuentas más el Prado, el Reina Sofía o el Thyssen?

Creo que el Reina Sofía, pero también el Prado en la última hora, la gratuita… Que esta ciudad es cara…

MpM: ¿Qué crees que ha hecho Madrid por ti?

Me compré la Vespa para escabullirme del tráfico, y tengo en la cabeza intentar convertirla en mi modo de subsistencia en unos años… Eso es mucho. Y bueno, mayor densidad de usuarias de Tinder que puedan convencerme a quedarme en Madrid.

MpM: ¿Qué es lo último que has experimentado en Madrid?

DR: Acabo de regresar de Elche tras las vacaciones navideñas, pero antes de eso, una comida china china en Arapiles y una cena en Los Chuchis de Lavapiés, que no es poco.

Los de Arzábal al habla

Los artífices del proyecto gastronómico Arzábal, Álvaro Castellanos e Iván Morales, nos hablan de su relación con Madrid y del crecimiento de su enseña.

Microplán Madrid: Ibiza, Lavapiés o Austrias, ¿con qué barrio os identificáis más?

Álvaro Castellanos e Iván Morales: Sin duda nos quedamos con Ibiza y el Retiro. Llevamos casi una década con ArzábalTaberna en la esquina de Menéndez Pelayo con Doctor Castelo siendo pioneros de las barras gastronómicas y tabernas castizas cuando la zona todavía no era considerada como la milla gastronómica madrileña. Actualmente, con la reapertura y ampliación del espacio tenemos intención de seguir dando mucho de comer y beber.. siempre bien y con nuestros criterios #Arzabaleros.

MpM: ¿Caña, vermú o vino?

AC/IM: Cualquiera de las tres opciones es apta en Arzábal. Actualmente contamos con más de 60 referencias por copas en la barra. Somos defensores del buen beber. Lo cierto es que somos más de champagne. ¡Las burbujas siempre sientan bien!.

MpM: En el Paseo del Arte, ¿Prado, Thyssen o Reina Sofía?

AC/IM: Sin duda, Reina Sofía. Con ArzábalMuseo, nuestra sede situada en el interior del Museo Reina Sofía desde hace tres años llevamos lo mejor de la taberna del retiro a nuestra sede en el MSR con más de 900 metros cuadrados de pura gastronomía. Terraza, salón, reservado, parrilla, Petit Lunch (nuestra versión de la cafetería en formato take away o para comer rápido, rico y mucho más.

MpM: En cuanto a la gastronomía castiza, ¿preferís callos, bacalao rebozado o bocadillo de calamares?

AC/IM: Cualquiera de los tres con sello Arzabalero. Somos muy de cuchara, de recuperar los guisos de siempre, de los platos que te hacen recordar. Un buen ejemplo son nuestras patatas a la importancia con cigalitas, pero también los callos o el cocido.

MpM: Si toca terraceo… ¿Azotea, patio interior o a pie de calle?

AC/IM: Siempre a pie de calle, fácil pero con criterio. En Madrid somos muy de terrazas. Ponemos un par de sillas y mesa en cualquier parte y nos encanta disfrutar de ese formato. Actualmente en nuestros tres espacios (ArzábalRetiro, el japonés Kirikata y ArzábalMuseo contamos con terrazas a pie de calle.

MpM: ¿Qué creéis que ha hecho Madrid por vosotros?

AC/IM: Todo y nada. Madrid ha hecho mucho por Arzábal, es nuestra casa, pero esperamos poder decir y creemos, que Arzábal también ha aportado su granito de arena por la gastronomía en Madrid.

MpM: ¿Qué es lo último que habéis experimentado en Madrid?

AC/IM: Una nueva apertura y aventura gastronómica, abrir ArzábalMarket en un sitio tan madrileño y de referencia como es el Mercado de San Miguel. Abrir en este espacio como operadores tras la reforma gastronómica de este espacio con las dos barras centrales del mercado (ArzábalMarket y Arzábal Bocadillería) y dos carritos, (Arzábal Croquetería y Arzábal Cervecería). ¡Una experiencia que no ha hecho más que empezar!