Corrala Lavapiés

La cárcel de Lavapiés

He aquí (léase: en la imagen de portada) una amable corrala del barrio de Lavapiés restaurada hace tres años. Hoy es un centro de mayores del Ayuntamiento de Madrid, pero a lo largo de los siglos ha albergado viviendas, una taberna, el taller de un zapatero, una tahona… y una cárcel de la Inquisición. Centrémonos en el último uso mencionado.

lavapiés3

El solar del edificio aparece en la topografía de Madrid que realizó Pedro Texeira en 1656 con las mismas dimensiones que tiene actualmente. Ya por entonces, y quizá desde finales del siglo XVI, pudieron hallarse entre sus muros las celdas de la llamada cárcel de la Corona, una de las que utilizaba la Santa Inquisión en Madrid. Lo que es seguro es que en el siglo XVIII y hasta 1820, cuando se abole la Inquisición, muchos presuntos herejes o inmorales pasaron en este lugar unos ratos de los que apetecen poco. Durante un breve tiempo, después de 1820, la cárcel siguió en uso, gestionada por el Estado. Y entonces un sacerdote pasó allí unos ratos regulares y, sin embargo, más breves de lo que seguramente le habría gustado. Hablamos de Matías Vinuesa, el Cura de Tamajón.

microplan-gif

Cuentan los archivos y las crónicas que en 1821 este tipo, capellán de honor del rey Fernando VII, urdió un plan para derrocar al gobierno del Trienio Liberal (1820 – 1823 ) y recomponer el absolutimo en España. El asunto salió a la luz y Vinuesa fue condenado a 10 años de prisión en la Cárcel de la Corona. Un sector del pueblo de Madrid, azuzado o por radicales liberales o por reaccionarios que querían asustar a las élites conservadoras, decidió que la pena era demasiado leve, irrumpió en la prisión y mató al preso en cuestión a martillazos, golpes de sable y tiros. Lo mataron mucho, sí.

Da la casualidad de que la calle de la Cabeza, donde se encuentra el edificio al que estamos echando un vistazo, recibe su nombre de una leyenda en la que otro religioso es degollado por su mancebo. Nos explayamos sobre ese asunto habitualmente en vivo y en directo.

Las antiguas mazmorras de la Cárcel de la Corona son visitables. Los calabozos, que han perdido las rejas de cierre, se abren desde un único pasillo y están comunicados por una especie de ojos de buey atravesados por cruces de hierro.

IMG_20150220_134332453IMG_20150220_134317219IMG_20150220_134347264

Adrián P. G.
Coordinador de Microplán Madrid
comunicacion@microplanmadrid.com
  • CMM Antón Martín, antigua cárcel de la Corona.

Calle de la Cabeza, 14.

calle cabeza

3 comentarios en “La cárcel de Lavapiés”

Deja un comentario