La azotea del hostel The Hat, ubicada en lo que fue un palomar, permite disfrutar sosegadamente del último verano del año a huéspedes y visitantes.
Desde aquí se ve un corte noble del auténtico Madrid de los últimos cinco siglos. Tejas, muros de ceguera blanca, la monumentalidad humilde de la colegiata de San Isidro (s. XVII), un aura de experiencia vivible.
La otra vista que ofrece la protagonizan la ampliación de 1950 de la antigua sala de alcaldes de casa y corte y cárcel de corte, posterior ministerio de Asuntos Exteriores (1636) y la torre de la iglesia de Santa Cruz (1902).
Entre la clientela se distingue a varios ejemplares de la etnia paneuropea que conforman los modernos hacendosos: trabajan solos o agrupados de dos en dos en dibujos y manualidades variadas, teclean o leen. Pero hay de todo y de todas partes, como corresponde.
Los precios en la azotea de The Hat no son nada disparatados, como ocurre en lugares semejantes. Damos fe de que el pincho de tortilla de patatas cremosa es un pincho de tortilla de patatas cremosa y vale lo que cuesta. Tostas, ibéricos, quiches y tartas completan la oferta gastronómica.
Una barra interior convoca a volver también con frío. Es el espacio donde en The Hat se organizan exposiciones y actuaciones musicales, además de en el vestíbulo.
- Azotea del hostel The Hat
Horario:
Lunes a viernes: 18:00 – 00:00 / Sábados y domingos: 13:00 – 00:00.
Calle Imperial, 9.
Estupendo. Lo apunto. Tengo curiosidad por ver las vistas desde esa calle.