La madrileña Ana Gómez es la fotógrafa gastronómica y de producto autora, entre otras muchas, de algunas de las imágenes de platos e interiores de restaurantes que aparecen en blogs como Madrid Seduce, Madrid Diferente o La Gastrónoma.
Los domingos por la mañana se equipa y sale al encuentro de los rincones más fotogénicos de Madrid con parada frecuente en el Rastro para hacerse con props.
Microplán Madrid: ¿Lavapiés, Barrio de las Letras o La Latina?
Ana Gómez: Barrio de las Letras. Siempre me ha encantado.
MpM: En barra, ¿caña, vermú o vino?
AG: Como no bebo, pido un zumo de naranja, un té, café… Soy muy de café y té.
MpM: ¿Eres de terraceo en azoteas, patios interiores o a pie de calle?
AG: Azoteas. Todo es más bonito desde arriba. Hace poco volví a la del Círculo de Bellas Artes y… ¡la han dejado increíble! También me gusta mucho el Jardín Secreto de Salvador Bachiller para tomar el brunch, sobre todo. Cuando viajo a otras ciudades, busco también miradores. Y bueno, ¡de Madrid al cielo! Las azoteas aquí son increíbles.
MpM: En plan castizo gastronómicamente hablando, ¿callos a la madrileña, bacalao rebozado o bocadillo de calamares?
AG: Bocata de calamares de toda la vida. Soy muy madrileña para eso. Me gusta comérmelo en la plaza Mayor y en un sitio cuanto más castizo, mejor.
MpM: ¿Dónde es más fácil que nos encontremos contigo, en el Prado, el Reina Sofía o el Thyssen?
AG: En el Thyssen. El Reina Sofía no es para mí y el Prado me gusta mucho pero hace tiempo que no voy. Ahora es muy caro… De todas formas, siempre me ha gustado más el Thyssen, exponen auténticas joyas. Recuerdo la exposición de obras de Canaletto, espectacular.
MpM: ¿Qué crees que ha hecho Madrid por ti?
AG: ¡Todo! Nací aquí y soy muy madrileña. Me encantan mis paseos mañaneros de los domingos por la ciudad, el Retiro… Madrid da muchísimo a nivel de ocio, restauración… ¡La disfruto!
MpM: ¿Qué es lo último que has experimentado en Madrid?
AG: He estado hace poco en el Gran Teatro Príncipe Pío. Tiene buena programación, buen ambiente, puedes tomar algo durante la representación… Muy agradable.
Un comentario sobre “Tras la cámara, Ana Gómez”